jueves, 12 de agosto de 2010

UN MAESTRO NUNCA SE VA

A Sérvulo Anzola maestro de maestros en Emprendimiento del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) de México, quien se retira de su camino habitual y se pensiona

Yo conocí a Sérvulo Anzola (para mi el padre del emprendimiento en América Latina) cuando el Rector de la Fundación Universitaria Unitec de Colombia, Doctor Fernando Parra, me invitó a tomar el primer curso de emprendimiento dictado por el Instituto Tecnológico de Monterrey de México en la sede de Unitec.

Corría el año de 1998. Hasta ese momento poco había oído hablar del tema de emprendimiento entre otras cosas por que en Colombia no se había difundido como hoy en día y además yo venía de trabajar en RCN radio por más de 4 años, algo totalmente diferente a la academia. Que recuerde en ese momento sólo unos pocos intelectuales daban la batalla para enseñar esta filosofía y me atrevería a decir que fueron los verdaderos pioneros: Hildelbrando Perico, Fundador de la Universidad EAN, quién desde hace más de 40 años habla del tema y es el sello de su Universidad, Rodrigo Varela del ICESI de Cali quién no ahorra energías en difundir el espíritu emprendedor, Marco Fidel Rocha que en esa época era Rector del Cesa y Fernando Parra Rector de Unitec de los primeros en firmar con éxito un convenio para implementar en Colombia el modelo de transferencia del programa emprendedor del TEC de Monterrey.

Pues bien esa mañana conocí a quién inspiraría mi pasión por emprender. El Maestro Anzola impartió el curso de emprendimiento, un motivador como ninguno, comprometido con los jóvenes empresarios, mostraba ejemplos y ejemplos de cómo era posible a través de la creación de empresas ayudar al desarrollo sostenible de los países. El impacto fue total en los asistentes (profesores en su mayoría) quienes a partir de ese momento se involucraron en el tema y soñaban con visitar Monterrey para conocer el centro de desarrollo empresarial del Tec y poder replicar esto en nuestro país. Y así se hizo.

Sérvulo Anzola, no nació en México, Nació en Cali Colombia, pero como nadie es profeta en su tierra, México lo adopto como uno de sus hijos y el TEC lo hizo suyo acogiendo su filosofía de emprendimiento la cual consolido al frente del Centro de Promoción y Desarrollo del Espíritu Emprendedor - CEPRODE de la División de Administración y Ciencias Sociales del ITESM, Campus Monterrey.

Los éxitos de Sérvulo Anzola no los alcanzaría a reseñar en este espacio, entre otros: Primer Lugar del Premio Rómulo Garza en 1983, premio que otorga el ITESM por Investigación, con una parte del trabajo: El Comportamiento de la Pequeña Empresa Mexicana.

Premio a la Labor Docente 1989 como Maestro Asociado de la División de Administración y Ciencias Sociales (DACS), del ITESM, Campus Monterrey.

Ganador del Segundo Premio del Concurso de Casos del Consejo Latinoamericano de Escuela de Administración (CLADEA) 1991 en el área de Administración.

Obtuvo el Premio a la Labor Docente e Investigación 1992 como Profesor Titular en la DACS del ITESM, Campus Monterrey.

Reconocimiento del Gobierno de la República de Colombia al Desempeño Profesional en el área académica, 1996.

Reconocimiento del Consulado Colombiano en México, al Desempeño en el área de Administración Educativa, 1996.

Reconocimiento de la Federación de Colegios Profesionales del Estado de Nuevo León, A.C. a la Excelencia Profesional, 1999.

Y que decir de sus publicaciones, las cuáles son un faro permanente para todos los que estamos en el tema de Liderazgo y emprendimiento, entre otras se destacan:

Curso Básico de Administración de Empresas Mc Graw-Hill 1999.

El Comportamiento de la Pequeña Empresa Mexicana.

Administración de Pequeñas Empresas.

De la Idea a Tu Empresa.

La Verdadera Actitud Emprendedora

Planes de Creación de Empresas a distintos niveles

Proceso Administrativo

Casos en Pequeñas Empresas

Casos en Administración

Guía para Maestros - Experiencias Académicas

Sérvulo Anzola no dictaba clases, inspiraba a los jóvenes para que tomaran como seria alternativa en su vida la de ser emprendedores. Su sencillez y don de gentes lo hizo único en su profesión. Siempre lo vi entusiasta, con una pasión desbordante por hacer que las cosas sucedan, viendo en cada problema oportunidades, así son los líderes.

Ese día de 1998 nos vendió la Idea, yo dejé la Radio y el Rector de Unitec me honró nombrándome coordinador del Programa Emprendedor, cargo que no existía. Empezamos de cero bajo la Batuta de Sérvulo y fue así como hicimos los primeros viajes a México con alumnos colombianos llevando sus planes de negocio que aprendimos a desarrollar con el modelo del TEC. Me convertí en un promotor del emprendimiento y con el Doctor Parra, Rector de Unitec, ciertamente un visionario sobre el tema y quién verdaderamente apoya el emprendimiento en Colombia a través de su gestión en su Universidad, llevamos los primeros 16 estudiantes Colombianos a participar en un congreso internacional de emprendedores en León Guanajuato, México y ganamos el primer premio como mejor empresa de servicios y al año siguiente estuvimos en el campus Tampico, en donde ganamos el primer puesto como mejor plan de empresa latinoamericana, todo bajo la mirada atenta de Sérvulo quien nos enseñó todo lo que sabemos hoy.

No era sino ver a Sérvulo Anzola por todos los stands hablando con jóvenes, motivando y vendiendo la idea de que todo es posible pero hay que hacerlo ya. Un maestro de maestros, los países de América latina le deben mucho, por que estoy seguro que de cientos de empresas que existe hoy en día , un gran porcentaje fueron creadas bajo la inspiración de Sérvulo Anzola.

Maestro, no me queda más que darle Gracias por sus enseñanzas y por hacernos mejores personas. La bandera del emprendimiento la llevaremos muy en alto en su honor. Cada clase, cada conferencia siempre lleva algo de su sello emprendedor.

Por último quiero compartirles el mensaje que me ha enviado anunciando su retiro del camino habitual.

Amigo Víctor Hugo, gracias por acompañarme, me retiro del camino habitual de mi tiempo. Me pensiono.

Con el tiempo, he aprendido a construir mis propios caminos ya que el terreno del mañana es demasiado incierto. He comprendido que la realidad del futuro no es real, solo es real el instante que estamos viviendo. Como aún, estamos en el tiempo, te envío un caluroso saludo. Hemos estado viviendo juntos todos estos maravillosos tiempos, gracias por todos estos momentos que nos tocó vivir. Gracias por ser, gracias por estar aquí, gracias por los incontables tiempos que cosechamos juntos, fue una muy gratificante experiencia, tan gratificante que la repetiría una y mil veces.

Amigo, las personas se hacen mayores justamente con el tiempo y sabios cuando ya no hay tiempo. Aprovecha el tiempo, el es el mejor consejero, el siempre tiene la razón, el nunca se equivoca. Con el te darás cuenta que los amigos verdaderos valen más que cualquier cosa. Entenderás que los verdaderos amigos son contados y hay que luchar por ellos.

Que tengas un bello día hoy, un lindo despertar mañana y siempre, yo estaré aquí hasta que nos volvamos a encontrar.

Que Dios te guarde en sus manos, sin apretar mucho el puño, te permita bolsillos llenos y pesados, un corazón ligero y rico en bendiciones y que en el camino del tiempo salga a tu encuentro.

Amigo, mil gracias por ayudarme a compartir mi tiempo.

Servidor y amigo

Sérvulo Anzola rojas